El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado la reactivación de los aranceles del 25% al acero y del 10% al aluminio importado, una medida que entrará en vigor el próximo 4 de marzo de 2025. Este nuevo ajuste comercial impactará directamente a México, que exporta más de 400 millones de dólares en estos materiales al mercado estadounidense.
México y la industria afectada
Los sectores automotriz, farmacéutico y de manufactura podrían ser los más golpeados por estos aranceles, al aumentar los costos de producción y reducir la competitividad de las empresas mexicanas en Estados Unidos. Ante esto, el gobierno mexicano, liderado por la presidenta Claudia Sheinbaum, ha manifestado su rechazo a la medida y busca una negociación con la administración estadounidense para evitar afectaciones al comercio bilateral.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, también ha declarado que México explorará todas las opciones diplomáticas y comerciales para mitigar el impacto de estas tarifas.
¿Se pone en riesgo el T-MEC?
Expertos en comercio internacional advierten que esta decisión podría generar tensiones dentro del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ya que afecta directamente la relación comercial entre los países miembros.
México apuesta por la unidad de Norteamérica como una estrategia clave para competir con mercados como China y Asia en general. Sin embargo, la imposición de estos aranceles representa un obstáculo para esta integración económica.
¿Qué sigue?
El gobierno mexicano continuará negociaciones para evitar que estos aranceles afecten aún más a las empresas nacionales. Mientras tanto, diversas industrias deberán prepararse para enfrentar posibles aumentos en costos y redefinir estrategias de exportación.