Los hogares mexicanos instalan más de un millón de equipos de aire acondicionado para hacerle frente a las más recurrentes olas de calor y los cambios bruscos de temperatura en México.
“En 2023, se tenían estimaciones del sector de ventilación y aires acondicionados de un millón de instalaciones de equipos de aire acondicionado cada año en México”, revela Yoelle Rojas, directora general del Clúster de Electrodomésticos (CLELAC)de Nuevo León.
“Cada año vamos a tener un ritmo similar, con un crecimiento acotado al propio incremento de la industria”, señala la representante empresarial.
En algunos meses de 2024 se concentrará la demanda principalmente de aires acondicionados y ventiladores y son aquellos en los que vivimos las olas de calor más intensas, comenta a Forbes México.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), se pronostican cinco olas de calor entre marzo y julio 2024.
La primera ola de calor se registró del 13 al 21 abril de 2024, mientras que la segunda fue del 3 al 13 mayo y la tercera inició el 20 de mayo y está en curso.
La temporada de calor (que comenzó el 17 de marzo y terminará hasta el 5 de octubre 2024), ha dejado 956 casos y 48 defunciones en Veracruz, Tabasco, San Luis Potosí, Tamaulipas, Oaxaca, Nuevo León, Hidalgo, Chiapas, Campeche, Guanajuato y Sonora.
“En el CLELAC no tenemos la visibilidad de la venta final al consumidor, para lo cual una mejor referencia puede ser el sector de tiendas de autoservicio, la ANFAD o los reportes de grandes jugadores del sector B2C”, explica Yoelle Rojas.
Para establecer algunas referencias, la fabricación de aires acondicionados es una industria con buena dinámica en el país, ya que el volumen de producción de ventiladores crece 3.8 por ciento, mientras que aires acondicionados para residencial registra un avance de 5.2 por ciento.
La representante empresarial dice que se puede hablar de que el sector la producción de aparatos de ventilación y aires acondicionados crece 7 por ciento anual en México.
El crecimiento del sector de la ventilación y aires acondicionados muestra el volumen y valor total de producción, lo cual corresponde países más industrializados y urbanizados del mundo.
La directora general del Clúster de Electrodomésticos de Nuevo León recuerda que la refrigeración es un sector que se divider por refrigeradores sencillos, refrigeradores con congelador y congeladores.
Los refrigeradores con congelador crecen (6.5 por ciento) y congeladores (2.6 por ciento), mientras que el refrigerador sencillo incluso llega a decrecer a ritmos de 2 por ciento anual aproximadamente.
En América del Norte, el refrigerador es el electrodoméstico más común y tiene una cobertura cercana al 100 por ciento de los usuarios, por lo que no consideramos que sea un electrodoméstico que pueda incrementar sus ventas debido a las olas de calor, comenta Yoelle Rojas.
La venta de refrigeradores en América del Norte obedece más a la sustitución de equipos, ya sea para mejorar la tecnología o la gama del mismo.
La tecnología reduce el consumo de electricidad
Con las olas de calor que se han presentado en el país durante el último mes, el mayor consumo de electricidad en hogares y centros de trabajo ha ocasionado una sobredemanda del sistema eléctrico a nivel nacional provocando apagones en diferentes ciudades.
La industria de electrodomésticos es pionera en el desarrollo de dispositivos ahorradores y de una manufactura que busca optimizar el consumo de recursos, especialmente el eléctrico, dice la directora general del Clúster de Electrodomésticos de Nuevo León.
“Las empresas que son parte del CLELAC llevan varios años desarrollando electrodomésticos que ofrecen un menor consumo de energía, sino que también desde las plantas de producción se ha buscado reducir considerablemente la huella de carbono”, expresa Yoelle Rojas.
Un refrigerador eficiente en consumo de energía puede ahorrar hasta un 70 por ciento de energía en comparación con un modelo antiguo y sin certificación Energy Star, un sello que obtienen los productos que utilizan menos energía que sus contrapartes convencionales, lo que significa que cuestan menos para operar y ayudan a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Un refrigerador Energy Star de tamaño mediano puede ahorrar hasta 200 watts por año en comparación con un modelo estándar del mismo tamaño.