**Un auto fabricado en México con 50% de contenido estadounidense pagaría el 25% solo sobre el 50% restante de su valor.
**Frente a la controversia, analistas predicen aumentos significativos en los precios de los autos en EE.UU., con estimaciones que van desde $3,000 hasta $12,000 por vehículo, dependiendo del modelo y origen, lo que podría impactar a los consumidores y reducir las ventas.

**Líderes de la industria, como la Alliance for Automotive Innovation, advierten que incluso las automotrices estadounidenses, como Ford, General Motors y Stellantis, enfrentarán costos más altos debido a su dependencia de cadenas de suministro globales.
**Por otro lado, la United Auto Workers apoya la medida, argumentando que podría generar empleos al incentivar turnos adicionales en plantas locales.



**A nivel internacional, Canadá y la Unión Europea han calificado los aranceles como un «ataque directo» y están considerando represalias, mientras Trump ha amenazado con aranceles aún mayores si estos socios comerciales coordinan una respuesta económica conjunta.
**En resumen, los aranceles del 25% de Trump buscan reposicionar a EE.UU. como un centro de producción automotriz, pero su implementación promete sacudir el comercio global y las economías interconectadas, especialmente en Norteamérica.