El peso se debilitaba ligeramente el viernes tras haber registrado la mayor ganancia diaria desde marzo de 2022 en la jornada anterior. El mercado estaba a la espera de nuevos datos que permitieran evaluar la salud de la economía estadounidense.
En ese contexto, el peso se cotizaba en 18.8759 por dólar, con una leve depreciación de 0.08% respecto al precio de referencia de Reuters del jueves, cuando se había disparado un 2.1% después de que el Banco de México recortara su tasa de interés principal.
Además, Reuters reportó que una propuesta de reforma al sistema judicial impulsada por el Gobierno, que había generado controversia, sería aprobada con modificaciones en los aspectos más radicales para calmar las inquietudes en los mercados.
Los analistas indicaron que el peso también estaba ajustando su valor tras un informe mejor de lo esperado sobre la actividad industrial en junio, aunque con una desaceleración en comparación con el mes anterior.
Se proyectaba que el peso cerrara la semana con un rendimiento acumulado de 1.5%.
Por otro lado, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) avanzaba el viernes por cuarta sesión consecutiva, con los inversores pendientes de nuevos datos económicos de Estados Unidos para evaluar la situación de la economía mundial.
El índice principal S&P/BMV IPC, que incluye las acciones más negociadas en el mercado local, subía un 0.14% a 52,952.34 puntos poco después de abrir.
La BMV había logrado un retorno semanal de 1.4%, recuperando el impacto negativo que los activos globales sufrieron el lunes debido a temores de una recesión en Estados Unidos.