Los precios del petróleo crudo cayeron a su nivel más bajo en siete meses y los índices bursátiles estadounidenses se acercaron a sus peores jornadas en semanas, ya que las preocupaciones persistentes sobre el crecimiento económico global afectaron tanto a las materias primas como a las acciones.
Datos clave:
El petróleo Brent, referencia internacional, bajó más del 4% a unos 74 dólares por barril, marcando su precio más bajo desde el 13 de diciembre de 2023. Por su parte, el West Texas Intermediate, referencia estadounidense, descendió más del 3% a menos de 71 dólares por barril, su valor más bajo desde el 17 de enero, según MarketWatch.
Esta caída siguió a la noticia de que China, principal importador de petróleo, reportó su cuarto mes consecutivo de descensos en el sector manufacturero. También se anticipan datos económicos importantes en Estados Unidos, como el informe de empleo de agosto programado para el viernes, que el mes pasado generó temores de una posible recesión.
Otro factor que incrementó las preocupaciones sobre el crecimiento económico de China y su impacto en la demanda global de petróleo fue una advertencia del Bank of America sobre un debilitamiento en las perspectivas de crecimiento de la economía china. Los economistas de BofA redujeron su pronóstico para el PIB de China en 2024 del 5% al 4.8%, y para 2025 y 2026, del 5% al 4.8% cada uno.
“Las inquietudes sobre la demanda debido a la posible desaceleración del crecimiento global están influyendo significativamente en el mercado petrolero en este momento”, comentó Tom Essaye, analista de Sevens Report.
Las acciones estadounidenses también cayeron el viernes: el Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq, con fuerte presencia tecnológica, bajaron más del 1% cada uno a media mañana. El último informe mensual del Instituto de Gestión de Suministros sobre el sector manufacturero resultó más débil de lo esperado, lo que intensificó las preocupaciones de los inversores sobre el crecimiento. Los tres índices están en camino de registrar sus peores días desde el 5 de agosto, similarmente afectados por el temor a una desaceleración global.
Tangente:
A pesar de que la caída de las acciones es relativamente modesta dado que el S&P 500 ha subido un 19% este año, recuerda las caídas significativas de septiembre en años anteriores: 3.9% en 2020, 4.8% en 2021, 9.3% en 2022 y 4.9% en 2023, promediando una disminución del 5.7% en el mes durante los últimos cuatro años.
Antecedentes clave:
Aunque los precios más bajos del petróleo crudo pueden ser positivos para los consumidores, al reducir los precios de la gasolina, también pueden señalar una desaceleración económica más amplia, ya que reflejan que empresas, consumidores y gobiernos están ajustando sus presupuestos. Históricamente, caídas significativas en los precios del crudo han coincidido con crisis económicas, como en 2008 y 2020. Actualmente, los precios de la gasolina en EE.UU. han disminuido, ayudando a mitigar la inflación.
Qué tener en cuenta:
Además del crecimiento económico, los mercados están preparando el terreno para las elecciones presidenciales en EE.UU. en noviembre. “Dadas las propuestas muy divergentes de los candidatos, esta elección será uno de los temas más importantes para los mercados en los próximos dos meses”, señaló el estratega del Deutsche Bank, Jim Reid.