Teherán, Irán — Miles de iraníes salieron a las calles de Teherán este miércoles para celebrar el reciente ataque con misiles lanzado por su país contra Israel, donde se escucharon gritos de “muerte a Israel” y “muerte a Estados Unidos”. Este acto de apoyo popular sigue a las tensiones crecientes en la región y la respuesta militar de Irán a las acciones israelíes.
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Seyed Abbas Araghchi, instó a la comunidad internacional durante su intervención ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU a no permanecer en silencio ante la ofensiva israelí. “Es el momento de actuar con decisión. Una acción rápida y decisiva es un imperativo moral”, afirmó en un mensaje de vídeo durante un debate sobre la situación de los derechos humanos en los Territorios Palestinos Ocupados.
Araghchi también advirtió a los países de la región que Irán considerará como “enemigos” a aquellos que permitan el uso de su espacio aéreo por parte de Israel para cualquier represalia contra su país. Estas declaraciones reflejan la creciente tensión y el estado de alerta en la región.
El líder supremo iraní, Ali Jameneí, también se pronunció, culpando a Estados Unidos y a algunos países europeos por las tensiones en Oriente Medio, aunque no hizo mención directa al ataque lanzado la noche anterior. “La base de los problemas de la región es la presencia de actores como Estados Unidos y algunos países europeos que claman falsamente por la paz y tranquilidad”, declaró.
En respuesta a los ataques de Irán, el secretario general de la ONU, António Guterres, condenó el lanzamiento de misiles balísticos sobre Israel, afirmando que tales acciones “no hacen nada por apoyar la causa del pueblo palestino o aliviar su sufrimiento”. Guterres emitió estas declaraciones durante una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad, que se convocó para tratar la situación en Líbano.
La situación se complica aún más tras la decisión de Israel de declarar a Guterres ‘persona non grata’ y prohibirle el acceso al país, en respuesta a su falta de condena inequívoca del ataque iraní. Hasta el momento, el secretario general no ha abordado públicamente esta declaración.
Los líderes del G7 también se unieron en su condena al ataque iraní contra Israel, acordando trabajar para “favorecer una reducción de las tensiones regionales” a través de la implementación de resoluciones de la ONU. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, convocó una conferencia telefónica para discutir la crisis en Oriente Próximo, reflejando la preocupación internacional sobre la escalada de violencia.
