
Por Dominique Desmeules
El lujo ha encontrado un nuevo hogar: América Latina. En un mundo donde las pasarelas y alfombras rojas han sido dominadas históricamente por casas europeas, los diseñadores latinos están emergiendo con una fuerza que no solo compite, sino que transforma. La moda de alta gama creada en esta región combina artesanía impecable, innovación moderna y una narrativa auténtica que encanta a celebridades, críticos y amantes de la moda en todo el mundo.
Aunque nombres consagrados como Carolina Herrera han sido pioneros en abrir el camino, el movimiento del lujo latino va mucho más allá. Herrera, conocida por su refinamiento clásico y su habilidad para capturar la esencia de la feminidad, ha vestido a íconos como Michelle Obama y Anne Hathaway, cimentando su lugar en la historia de la moda. Pero este legado ha inspirado a toda una nueva generación de diseñadores que están llevando la elegancia latina a las pasarelas internacionales.
Oscar de la Renta, aunque nacido en República Dominicana y ya parte de la historia del lujo, continúa siendo un faro de glamour. Sus creaciones son un testimonio de cómo el lujo latino puede ser sensual y sofisticado a la vez. Sus vestidos, a menudo vistos en la Gala del Met o los Oscars, son piezas que combinan tejidos exuberantes y detalles románticos, siempre celebrando una estética global con raíces caribeñas.
A esta élite se unen diseñadores contemporáneos que están rompiendo paradigmas. Johanna Ortiz, de Colombia, ha conquistado el mercado global con su mezcla de siluetas fluidas y dramáticas, adornadas con estampados tropicales que evocan la riqueza de su tierra. Sus piezas han llegado a las manos de celebridades como Beyoncé y Emily Ratajkowski, llevando la feminidad latina al centro de atención.
Desde México, el talento también deslumbra. Kris Goyri, un favorito de las it-girls, está redefiniendo el lujo moderno con un enfoque minimalista pero cargado de intención. Sus diseños son una oda al movimiento y la sensualidad, con piezas que brillan por su simplicidad y cortes impecables. A su lado, Benito Santos, quien saltó a la fama tras vestir a Ximena Navarrete en Miss Universo, ha llevado el glamour mexicano a las alfombras rojas con vestidos que combinan majestuosidad y modernidad.
En este creciente panorama, también brilla Alersundi, una diseñadora tampiqueña que está emergiendo como una estrella en el ámbito de la alta moda. Con una visión audaz que mezcla detalles meticulosos y formas escultóricas, sus creaciones son ideales para quienes buscan destacar en galas de alto perfil. Alersundi representa la esencia de la nueva ola del lujo latino: audaz, auténtica y profundamente sofisticada.
El lujo latino ya no es solo un fenómeno regional; es una declaración global. Las alfombras rojas, desde Cannes hasta los Oscars, ahora están adornadas con diseños que cuentan historias de identidad, cultura y modernidad. Más allá de las tendencias, el lujo latino representa un espíritu innovador que está aquí para quedarse, con nombres establecidos como Herrera y de la Renta pavimentando el camino para una generación de diseñadores que están redefiniendo las reglas del glamour.
Así que, la próxima vez que contemples un vestido que roba miradas en una alfombra roja, recuerda: podría ser el inicio de una nueva era del lujo, una que habla con un fuerte y elegante acento latino.