29.1 C
Tampico
21 septiembre,2024
Image default
Titulares

EN PORTADA

El joven fotógrafo cuenta para ALTHER Magazine su paso por proyectos en editoriales como Vogue y Harper’s Bazaar, así como su trabajo para empresas de la talla como Chanel y Givenchy

POR: Valeria Saucedo

Un apasionado de la fotografía que salió de Tampico, Tamaulipas en busca de sus sueños, ese es Alejandro Salinas, quien ha trascendido con su trabajo, a través de su lente, para grandes empresas que van desde Chanel y Givenchy, hasta editoriales de la moda como Vogue, Esquire y Harper’s Bazaar.

De familia dedicada a la medicina y contabilidad, Alex nos cuenta cómo es que decidió romper el molde y dedicarse al diseño, a la fotografía y video profesional para la industria de la moda en México y el extranjero.

Platícanos ese momento que me imagino que fue difícil, complicado para la familia, decir: no me gusta la salud, no me gusta la medicina, no quiero ser doctor (para nada), quiero ser otra cosa.

Ya venía desde atrás empezando por mi papá doctor, mi hermana doctora, mi mamá contador público, o sea siempre como que todo muy cuadrado, entonces cuando dijeron no es medicina mi mamá fue: es contador público, y yo dije pues bueno, va… estudié, estudié un semestre en contabilidad, estuve nomás no, no me fue bien, no me hallaba, los números no son lo tuyo, no eran lo mío, y me acuerdo.

No era buen estudiante, los semestrales son mi catarsis, en todo esto, de ver que lo mío era lo creativo, pero me fui yo de viaje a México, a la CDMX estuve con mi familia allá, y de repente me hablan ¿oye en dónde estás? En la CDMX, estamos en semestrales, y yo cómo, estamos en semestrales ahorita, y yo qué pasa si no voy… pues repruebas, y yo bueno Bye.

Claro que reprobé, y estábamos platicando con la familia, y yo es que no me gusta mi carrera, me quiero enfocar como a publicidad, moda, pero no sé haciendo qué, o sea porque la onda de no sé a qué, pero la onda o sea que quiero estar en televisión, moda en revistas, pero no sé exacto en qué, ya mi familia como que me dijo pues te vas a comunicación a diseño gráfico o a mercadotecnia… Entonces ahí como que me vine a Tampico, ya pensando en cómo que me voy a ir…

Pero lo que no sabían es que te llevaron a México y no sabían que te mostraron el mundo, ¿no?

Claro, yo iba viendo a mi lo que me que me encantaba y lo que me quedó a mí deslumbrado como todo niño provinciano, uno eran los edificios, pero me acordaba de ver, de que, un edificio con toda una publicidad, de una película, de una revista y yo soy de Tampico, en Tampico no hay esto, de que está muy padre. Entonces me regresé como con toda esa onda de cómo le hacen o quién trabaja ahí o cómo llegó ahí.

¿Cuántos años tenías ahí?

Estaba chiquito, sí, era un baby y ya regresé para acá (Tampico) y fue pues ahora sí decirle a mi familia pues ya no quiero ser conta, quiero dedicarme, dije yo al diseño, dije no matemáticas, diseño gráfico, venga. Y todavía como que lo dudabas…

Porque la verdad no me interesaba el diseño como tal, pero decía va como más acorde a publicidad. Dije bueno, vámonos por ahí.

Pero tu familia lo vio, así como que bueno, no es doctor, no es conta, pero, pero quiere estudiar algo, pero quiere estudiar.

Ajá, quiere estudiar, pero dije no, pues bueno, ándale, entonces me voy al IEST. Y en vez de estudiar y todo bla, bla, a veces bien, a veces mal. Nunca he sido un buen estudiante, siempre he sido muy del relajo, o sea, el niño no problema, pero si el niño relajo.

¿Digamos que eres más como relaciones públicas no?


Yo no iba a la escuela a estudiar, yo iba a pasármela padre. Para eso hay que ir a la escuela. Digo, aprendes, pero también eso va uno a hacer conexiones, a pasársela chido. Y este entonces pues no era como tan fácil. Entonces a la mitad de la carrera llevo una clase de foto y ahí es donde yo aprendí primero a retocar en Photoshop. Me interesaba mucho como el aprender a quitar de que la arruguita y el dejar como este para revistas y así. Y luego tengo la clase de foto. Me compran la cámara y empiezo yo como a empezar a experimentar con la cámara. Y digo pues sí, sí, me está gustando. Y no me sentía tan ajeno ¿Qué era qué?
Una canon era, una canon que me regaló mi mamá. Fuimos a Sanborns, aquí está tu camarita, tu kit con la fundita y todo.
Él a todos lados traía su cámara.
Y era yo de irme a practicar con mis amigas de vamos ponte un vestido, vamos a hacer moda y ponte un vestido y nos vamos al bosque de ahí de la playa. O sea, al jugarle, al jugarle a ser fotógrafo. Y así fue como empecé realmente. Así fue como poco a poco empecé a más.

En realidad, el talento ya lo traes Alex porque al final no fuiste como a la escuela especializada en fotografía.

La idea era, o sea, todo viene un poquito de más atrás. Yo siempre era como el niño medio raro, yo siempre tenía una cámara de video para todos lados. Eso mucha gente no lo sabe, pero en mi familia hay cosas de mi familia grabadas por todos lados, porque yo siempre traía cámara de video y el sueño era ser director de cine, pero pues bueno.

El sueño es ya, ahorita ya no, no, evolucionó, evolucionó a la foto, pero sí cuando me dijeron es Tampico y no te vas a salir nunca de aquí a estudiar, O sea, tienes que quedarte aquí. Fue como de ok, pues ya decidí, ya conta y luego decidí diseño gráfico y luego ya llegó lo de la foto y en foto ya como que sentí que me hallé, has de cuenta entonces ya todo lo que empecé a hacer en la universidad, aunque fuera de diseño, todo era enfocado a fotos, que pedían un portafolio, yo era de un portafolio de foto que era ser más visual. Yo de que una identidad corporativa, de un estudio de foto, o sea, todo era como enfocado como al negocio.

Yo les decía estoy enfocándolo a mi negocio cuando salga de aquí. Entonces también era muy incomprendido porque todos eran de que esa es la carrera de diseño gráfico, no el de fotografía y yo de, que, o sea, te encontraste, digo a lo largo y creo que esto también.

Lo que, bueno, muchos jóvenes que lo puedan ver, que lo van a escuchar, se van a sentir muy identificados. No creo que el ser de provincia en ser de una ciudad que todavía es una ciudad pequeña, aunque ha crecido mucho, es una ciudad pequeña.

Nos encontramos con muchas limitantes en esa vida, de cuando sales de la prepa y es ¿y ahora qué? O sea, viene la parte profesional, pero es la parte profesional que te va a marcar toda tu vida. Probablemente es lo que vas a hacer.


Pues ahí el problema para mí fue después de que ya dije me gusta la foto, el llegar a mi casa y decir pues ya no quiero diseño y decirle a mi mamá me voy a dedicar a la fotografía porque ya sé que esto es lo que me gusta. Era mi mamá, lloraba. Puso el grito en el cielo.
Claro, les hablaba a mis tías y lloraba. Si usted quiere ser fotógrafo ahora y yo porque no me apoya, nadie me apoya, nadie me apoyaba, o sea, todo el mundo así de Alejandro, de que otra vez, de que otra cosa y yo entonces así estuvimos un buen rato. Este yo creo que hasta que salí de la carrera.

Que es lo que te digo. O sea, muchos jóvenes como tú tenemos la limitante primero en la casa, o sea, creo que también los papás o la familia nos limitan demasiado y en segunda, tus mentores profesionales no decir oye, no, a mí también me decían oye, o sea, no vas a vivir de esto, no vas a vivir haciendo esto.

Viene también desde casa. El decirte el pensar que un título te va a asegurar un futuro creo que es lo más erróneo del mundo.

Yo tengo que diez años que me gradué y en mi vida he utilizado mi título, lo tengo, lo tengo enmarcado y todo el título ahí está. Pero en mi vida he utilizado mi título, o sea, para ningún fin profesional, para ningún fin, y en el ambiente en el que estoy, es muy chistoso, ni siquiera un CV; sí ven lo que has hecho, lo que piden es un portafolio, ven lo que has hecho, para quién has trabajado, pero como un CV, así en forma y todo relativamente todo más informal.

¿Desarrollaste la fotografía en la zona sur de Tamaulipas o siempre te fuiste?

No, realmente todo mi portafolio que hice al principio fue aquí y luego un poquito en Monterrey.

¿Cuánto tiempo trabajaste aquí en haciendo fotografía?

Yo empecé a los 21 creo, empecé a los 21, pero a practicar, yo no me vendía, o sea yo no vendía paquetes de fotografía, no vendía nada, y de hecho yo creo que al año o a los meses, ya la gente me empezaba a buscar y me decía, cuánto me cobras por una sesión…y yo les decía no, no, pero por qué, de que las fotos están bien padres.

No soy fotógrafo y yo soy así, les decía, no soy fotógrafo, me interesa y me gusta, pero no te puedo cobrar por algo que no sé. O sea, estoy aprendiendo, y me dicen, pero es que me gusta, quiero que me hagas unas iguales, y yo no, porque si a ti no te gusta lo que yo hago, o sea si yo te quedo mal yo no me voy a sentir a gusto y no sé cómo reaccionar, porque nunca he trabajado de eso, esto es para crear mi portafolio y aprender.

Estuve dos años así hasta que me sentí lo suficientemente listo, preparado que ya sabía bien sobre fotografía, edición, sobre dirección, o sea que tenía como cierta idea, que ya empecé a cobrar, este o sea para también no llegar y cobrar poco, o sea yo quería ganar bien; y estamos en Tampico, uno no gana números grandes cuando eres fotógrafo y nuevo, pero quería cobrar algo decente, no estar cobrando $800 por una sesión, -$500 por 15 minutos, que sí pasa, hay que valorar mucho, el equipo cuesta, el aprendizaje cuesta, las frustraciones cuestan, todo cuesta.

Entonces pues traté de prepararme primero, y luego fue cuando ya empecé a cobrar y hacer sesiones en Tampico, y después de esto cuando me voy a Ciudad de México y descubro que todo el portafolio que hice aquí, con mis amigas, con mis primas, con todo eso me ayudó a que me abriera las puertas allá, principalmente con las agencias, que eran las que cuando ven el trabajo, nos conviene trabajar con él y modelo que necesites, toma.

¿Cómo es una persona de provincia llegar a la ciudad de México con una gama impresionante de fotógrafos, en la CDMX, con trayectorias larguísimas en la CDMX, y decir- Hey estoy bien chavo, me gusta la fotografía, vengo de Tampico un lugar chiquito en el mapa, pero aquí estoy?

La neta sí está difícil, pero yo creo que no fue más difícil que aquí eh,  la diferencia de pensamiento, cultural, o sea de cómo me llevaba con fotógrafos aquí, que realmente no tengo amigos fotógrafos más que uno, pero la diferencia allá, era muy diferente; allá era qué se te ofrece, qué necesitas, – es que necesito esto, se me rompió un lente, ven por el yo te presto otro, o sea era como muy de compañerismo.

Y era algo que yo no estaba acostumbrado, yo estaba acostumbrado a que te metieran el pie, que la competencia te metiera el pie, y eso siempre se me ha hecho como de… la onda es de crecer juntos,  no ver quién, y en Ciudad de México no se daba, o sea me ha tocado, yo tengo mucho trabajo ahorita, porque fotógrafos top, porque a lo mejor hay clientes que no me conocen todavía, y a lo mejor el fotógrafo no puede, es vayan con Alejandro, es una recomendación y es un paso pasarnos chamba y es súper padre. La verdad no confío en nadie, no te puedo recomendar a alguien, está cañón, el tema cultural.

Como empieza Alex Salinas, digo nuevo en esto que platicamos, nuevo en el sentido de llegar a esta ciudad nueva para ti, en el tema laboral digo no era nueva, seguramente ya la conocías, pero en el plano laboral, dejar a la familia, dejar las comodidades, pues no es lo mismo vivir en casa de papás, que la mamá te esté apapachando, el desayunito para el niño, llegar y ya valerte por ti solo, empezar a tocar puertas, ¿cuál fue tu primera oportunidad laboral en México?

Ok, mi portafolio de Tampico a lo mejor no me va a conseguir el trabajo que yo quiero, pero lo primero que yo dije fue quiero hacer moda, quiero enfocarme en moda, lo primero que tengo que hacer. Yo llegué el lunes, para el miércoles ya estaba haciendo fotos, y no pagadas, era colaboración, dije necesito renovar todo mi portafolio, con quién, con modelos de aquí, que la gente vaya ubicando de aquí, porque el ambiente es muy chico, entonces si llega una modelo nueva de Nueva York, todos los fotógrafos empiezan a agarrarla, y empiezan a hacer fotos con ella, entonces yo era también igual, de que ok llegó tal modelo, la modelo es nueva, ok, tráemela y empecé a construir un portafolio nuevo durante el primer año, para empezar poco a poco captando clientes, también para subir a redes, porque es súper importante.

Toda mi clientela llega de Facebook e Instagram, así, si yo no tengo Facebook e Instagram, no hay trabajo, entonces todo llega de ahí, entonces como el nutrir todas las redes, el estar constantemente dándoles contenido, subir todo, subir el backstage, a la gente le gusta mucho ver el backstage, cómo haces las cosas, cómo son las modelos; eso es contenido lindo, que les encanta ver es muy interesante, y mi primer chamba, yo creo, y no fue una chamba tan grande, fue para una campaña yo creo para una marca de ropa, que era como básicos, chamarras, ropa de hombre.

La pregunta era, ¿cuánto lo cobro?, y yo denle agua, denme agüita, sí o sea la idea era de cómo lo cobro, porque uno no sabe, aquí en Tampico, una campaña me pagaban, no sé, como $8,000 y allá, y era un cliente, que vendía ya en una tienda grande, entonces te quedas como cuál es la bara, o qué poco me puedo ir, y pues poco a poco me iba informando y le decía a amigos fotógrafos, que yo veía más experimentados o más grandes, ayúdame cuánto cobro, porque no sé, no hay otra forma, porque la gente piensa y siempre me dice, cómo sabes, te informas, te informas wey te informas y preguntas, buscas.

Me estás contando, tenías bien claro, la parte de la moda, es lo que tenías bien definido, cuando pensaste en moda, ¿tenías ya la meta voy a hacer esta portada?

No, nunca, nunca. No te pasa por la cabeza, mi primer portada que me compré, fue en 2012 y me la compré porque dije quiero estudiar, quiero ver qué están haciendo los fotógrafos, cómo son las portadas, cómo es la composición, cómo es la luz, o sea, las producciones, pero uno la compra, en ese momento la compré y dije estaría padre, que algún día, pero uno no sabe, en la escuela no me enseñaron nada de eso.

Es algo que vas viendo y como va llegando la oportunidad, pero honestamente, si me preguntas, hace 8 años, pensarías que voy a estar haciendo la portada de tal revista o estar haciendo mil editoriales, o que vayas a Nueva York para estar haciendo editoriales para Bazaar, para Square, no, no, porque no tenía idea ni de cómo, no conocía tampoco a la gente que estaba en el medio, o sea era difícil.

No tenías ni los medios, me refiero a los medios en el que también esto es mucho de relaciones, no tenías estas relaciones para decir, yo voy a llegar, la voy a romper, me voy a ver con tal persona, o sea te fuiste abriendo el camino literal con tu trabajo

Yo era un Stalker de Facebook y de Instagram, entonces literal, empezaba yo a ver, a ver quién es el encargado de tal cosa y les mandaba mensaje, de hola, este, soy fotógrafo, no quisieras que hiciéramos algunas fotos, o sea súper informal, pero mucha gente, había gente que me decía que no, y gente que ya estaba súper posicionada, y me decía, veía el trabajo y me decía sí, qué onda, cuándo armamos algo, y yo venga, y no dormía, me quedaba en shock, y era un nervio, un nervio, y ahora ya no da nervio, la neta, pero antes, si para irme a shooter, el dolor de estómago, los nervios y es que cómo le voy a hacer.

Ahorita que abriste la plática de las marcas con las que has colaborado, digo, yo lo sé, admiramos tu talento, pero platícale a la gente de ALTHER, ¿cuáles son las marcas con las cuales has colaborado?

Ahorita este año, me tocó publicar mucho, en editorial, me tocó hacer Vogue, me tocó hacer Harper´s  Bazaar , me tocó hacer Square, esperemos pronto GQ, y con marcas he hecho, con marcas de lujo, hicimos una editorial para Chanel, directo para Chanel, en Tulum este año, hicimos en mayo la colección de Dior, la pasada, Montblanc, y también diseñadores mexicanos, porque buscamos incluir el talento mexicano, y aparte el talento tampiqueño, nos llevamos luego ropa también de aquí para poder darles proyección, que también anda allá en el Fashion Week, ya nos tocó andar allá con ella en el New York Fashion.

Platicabas fuera de cámaras, que no nada más como dices tú de apoyar el talento mexicano, el talento de tu tierra, claro, que nadie se dio cuenta, que fue como que no se avisó a nadie, pero aquí se hizo la portada de Dior

Hay muchas cosas que nadie sabe de gente de Tampico, creo que hace falta mucha difusión, en algún momento, yo en mi primera publicación con Vanity Bazar fue en el 2019 como en junio, luego de ahí publicamos en septiembre otra editorial, y en algún momento me dieron como mucha libertad creativa y yo dije, oigan yo quiero hacer una editorial para ustedes, en Tampico, y todos, y qué hay allá, allá está padre, y yo está hermoso, entonces me dijeron haz lo que quieras, tienes carta abierta.

Nos trajimos marcas de todo, nos trajimos Dolce, Gucci, Ferragamo, nos trajimos modelos, maquillistas, o sea una producción grande e hicimos la sesión Miramar en la playa, La foto de la portada es Alejandra Lersundi y le dije vamos a publicar, necesito un vestido tuyo, necesito poder meter un vestido al agua, porque tiene que ser la foto, entonces armamos todo, trajimos todas las marcas, diseño mexicano, marcas de lujo e hicimos toda la producción aquí en Tampico, en Madero y salió en noviembre de 2019, mucha gente ni se enteró, pero cositas como esas, o sea mi primer chamba con Vogue, era un chamba comercial para Vogue, unas sudaderas que iban a lanzar, la modelo con la que iba a trabajar era de Tampico, que era una modelo que yo conocía hace como 4 años aquí, creo que era una modelo nueva y venía con la mamá, de hecho yo le dije a la mamá: señora, no tiene nada que hacer ella aquí, mándela afuera, el perfil que tiene ella es lo que se está moviendo en la Ciudad de México, llévela.

¿Y te escuchó?

La señora estaba de que hay es que no sé, es que está muy chica, señora llévela, la niña ya ha estado en Brasil, en Milán, en México, lo que hicimos fue con Vogue, ahorita ella es la portada de la colección que yo hice para Bazaar, ella es la portada de la revista de Dior, de la que está en tienda, donde vienen todos los artículos, la colección todo, ella es la portada, se llama Mildred Mascareñas, tampiqueña.

Alex no solamente es el ojo detrás del lente, es decir, en este mundo en el que te desenvuelves, eres un descubridor de talentos, tienes ese ojo

Aprendes, aprendes, ya como a ver quién tiene como un perfil interesante, cuando yo vi a esta niña dije tiene un perfil interesante, sí claro, no a todas a las que fotografías tienen potencial. Claro, y hay diferentes perfiles, hay gente que va más para la actuación, hay gente que va más para la cantada, hay gente que va más para la modelada, entonces uno ve.

Cuando te llega la revista en físico, cuando ves esa portada, cuando dice Alex Salinas en las fotografías, cuando ves a una Fernanda del Castillo, diciendo gracias por todo el trabajo, qué dicen en casa, porque ahorita me dijiste: mi mamá lloraba, le decía a todas mis tías, es que quiere ser fotógrafo, sufría, tu papá una eminencia médica, director que probablemente también sufría, pero a lo mejor, los papás son más reservados,  si pues que hagan sus sueños, que no me den lata, pero cuando ven esa portada

Cómo ha cambiado, pues mi papá dice es mi hijo, es mi hijo y mi mamá; pues la neta están en la sala, llegas y es lo primero, están, sí es algo que no se imaginaban.

¿Y tu mamá ahora les habla a tus tías?

Claro, ya lo sube a Facebook, lo sube a sus grupos de WhatsApp. Sí, hasta hace poco mi mamá me dijo: Hay perdóname, por no haberte apoyado al 100, o sea siempre han sido un apoyo, pero siempre muy dudosos.

Y ese éxito que has tenido, digo que has tenido hasta este momento y digo hasta este momento, ¿ese éxito ha cambiado la manera en tu relación con tus papás?

Sí bastante, si porque yo creo que ellos pensaban que iban a batallar conmigo hasta que tuviera 50 años, que iba a ser un vago, sí yo creo porque fui un adolescente bastante revoltosito, y en universidad también era, pues siempre me ha gustado la fiesta, y siempre era de tener a mis amigos, y vámonos acá y de idear un plan raro y vámonos, vámonos… Y mi mamá así de… entonces yo creo que siempre, como que pensó que iba a tener esa preocupación, como que la madurez no iba a llegar, y ella así de este va a ser de que Forever Young y no la va a hacer y con lo de la fotografía quién sabe a qué se vaya a dedicar… y pues no, poco a poco fue tomando forma la carrera y ellos lo fueron viendo, mas que nada.

¿Qué les puedes decir a esos jóvenes que están ahorita sufriendo esa parte en su casa, porque todavía se ve, pareciera irreal, pero mamá quiere que estudie eso, que si no hago esto seré la oveja negra de la familia, qué les podrías decir a esos jóvenes?

Ser la oveja negra está padre, si lo sabes canalizar, si estás muy descarriada, ahí también ya es otra cosa, pero ahora sí que confíen en su instinto, yo realmente mi limitante, era en cuanto al estudio, era de que me decían o es esto, o es esto, a mí realmente no me dieron a escoger, pero algo yo sentía, decía no, o sea confíen mucho en su instinto, de que, si algo no les late, si algo no les hace completamente felices, piensen bien así, si se ven en 10 años haciendo lo que están estudiando.

¿Y qué le dirías a esos papás pues que son los que presionan y limitan a sus hijos?

Yo no que les reprima mucho a mis papás, pero es algo que aún tengo conversaciones con ellos, y siempre les digo por qué, o sea como por qué, o sea por ejemplo desde chiquito, yo cantaba de chiquito y cantaba muy bonito, entonces era por qué me mandaron a clases de matemáticas, por qué no me mandaron a clases de canto, o sea o si me gustaba la foto, o si me gustaba el cine, por qué no me mandaron a clases o a trabajar con alguien, que se dedicara a tomar video de algo, o algo como que fuera como que más a fin.

Yo siempre fui, desde chiquito se ve, este chavo va a ser más artístico, de que métanme a clases de guitarra o a clases de música, y era de no, guitarra, es que quiero cantar, no, guitarra, y yo, siempre fue el no, el no darme el gusto, era como darle gusto a ellos, entonces yo les diría a los papás, pues traten de darle gusto a sus hijos, no traten de vivir como sus sueños a través de sus hijos, porque eso pasa mucho, y pues siempre apoyarlos realmente, yo siempre les digo a mis papás, si yo te hubiera dicho quiero ser payaso, wey está chido, pero esfuérzate a ser el mejor payaso, el más divertido… Si no hay el apoyo de los padres, creo sí es todavía más difícil.

¿Cómo no hacer lo que hacen todos los demás, cómo marcas esa diferencia en el trabajo que realizas?

Creo que siempre es más importante estar bien influenciado, yo desde chico si era, siempre he sido fanático del cine, desde chico y era un niño bien raro, yo a mis 7 años, 6 años, no veía caricaturas y mi película favorita era La muerte le sienta bien de Robert Zemeckis, veía cosas que no debía ver a mi edad, y era como medio precoz en ese aspecto que era como que… de que este niño no está bien pero siempre tuve como de influencias muy aterrizadas a lo que yo sentía que podía hacer.

Y cuando llegue a fotografía también me fijaba mucho en la estética cinematográfica, como quien dice entonces, me gustaba mucho ver ese tipo de acabados en fotografías, y en Tampico no lo veía tanto, sí tenía mis referentes tampiqueños, que era de lo que wow lo que hacían, cuando no tenía ni idea de foto, veía fotos de tal y tal fotógrafos que no vamos a decir sus nombres, pero sí referencias que yo decía wow, cómo hicieron eso y lo veo ahorita y digo ya sé cómo lo hicieron, pero uno va también creciendo también con los referentes que te vas poniendo como metas, te vas poniendo gente más posicionada, qué van haciendo y qué van creando, y vas diciendo pues sí se puede, sí puedes empezar. O sea, te abre mucho, o sea te abre el panorama, te hace una cultura visual.

¿Ha habido momentos en los que, a lo largo de 8 años, has dudado de tus capacidades para lograr alguna portada?

Llega muchas veces la frustración, el mundo editorial se maneja de cierta manera, por ejemplo para las portadas, muchas veces, y para las revistas, muchas veces existen este acuerdos comerciales entre marcas, entre la revista, entonces a mí por ejemplo luego me limita mucho eso.

Por ejemplo, si hay joyería y la joyería es chiquita, y tienes que hacer una portada impresionante, pero se tiene que ver la joyería, y la joyería es un aretito así, es como de, te hago un beauty, un close up, como tienes que aprender ahora sí, a que tú como fotógrafo tienes que solucionar, tienes que darle lo que está buscando el cliente, el que está pagando, lo que está buscando la revista, lo que está buscando la editorial y lo que estoy buscando yo como fotógrafo, y lo que quiero comunicar, entonces tiene que haber como que un balance entre los tres, para que ahora sí todo el equipo estemos contentos.

Creo que fuera de ahí, limitantes, estoy muy acostumbrado a trabajar con lo que hay, estoy como super mentalizado a que en las producciones algo va a salir mal, y no es que sea pesimista, soy realista, llego a las producciones y digo a ver qué va a pasar hoy, o cuál es mi espacio o cómo va a estar la producción hoy o qué se va a montar, si va a haber un set o qué tipo de iluminación, y ahí es donde yo empiezo a solucionar, yo creo que mi chamba más que nada es como solucionar el problema visual, y comunicar lo que todo el equipo tratamos de comunicar.

¿Cómo logras generar ese equilibrio, eres auténtico, tienes una esencia, una personalidad auténtica de Alex Salinas, cómo logras equilibrar esa parte con lo cuadrado o qué tanto te dejan influir en tu trabajo?

Realmente ahorita sí, la influencia creativa en mi trabajo, creo que sí es bastante, creo que ya hay un nivel de confianza, con la revista, con los editores, con las editoras, con los directores de arte, ya hay una libertad bastante grande, los productores cinematográficos, una libertad grande que sí ha costado sus buenos años, sus 8 años, pero si de repente si hay clientes que, y también hay que respetar, cuando hay un cliente y ya trae la idea muy marcada, donde a lo mejor a mí ya no me toca influir en el concepto, me toca nada más como de que yo llego, hago mi chamba, el cumplir con los estatutos que me está pidiendo la marca.

Hay veces en las que obviamente le pones tu firma y si algo por ejemplo en alguna marca, he aprendido a como comunicarlo mejor, cuando algo en una marca y me ha tocado, no se ve bien, ya he aprendido a comunicarlo de que está padre, cuando algo no me gusta, está padre, pero qué tal si también hacemos esto y tomamos un poco de ahí, cambio de opinión, hay un input ahí, y se toman ahí esas dos opcioncitas, ya que el cliente decida al final, pero al final el que decide es el cliente.

¿Qué retos has enfrentado, un reto que digas no manches esto me costo un chorro a lo largo de estos años?

Yo creo que, al inicio, cuando me fui a la Ciudad de México, el comunicarme con la gente, yo siempre he sido como que muy sarcástico.

Somos norteños, soy sarcástico, hablo fuerte, hablo golpeado, entonces cuando llegué allá la gente decía, es que él es muy conflictivo, todo por que era directo.

Por ejemplo, si yo veía algo y no me gustaba o estaba mal, yo le decía: eso no está padre, cámbialo y para mí es muy normal, pero la gente pensaba que estaba enojado y yo les decía: no estoy enojado, no, no.

Es que le habló feo, le gritó, y yo de wey no, es que así hablamos allá.

También allá la gente no sabe decir que no, si tú le preguntas, oye te gusta esto: Sí; y yo no, no me gusta, me estás preguntando mi opinión, no, no me gusta, sinceramente no me gusta, ¿pero por qué?.

He aprendido a comunicarlo mejor, a maquillarlo un poquito, ya vi que a la gente no le gusta luego como hablamos acá en el norte. Y si era un issue grande, la neta, a la hora de escogerme para un proyecto, si era de que, es que luego está enojado, y yo de no, yo así soy.

Pero fuera de eso, no creo que haya sido para mí tan difícil en la Ciudad de México, creo que ya tenía buenas bases cuando salí de aquí de Tampico.

Cuando empiezas a hacer, llegas, haces tu scouting, digo, supongo nunca te he visto en acción, que ya cuando agarras tu cámara, tu lente, haces los cambios, ya se transforma Alex Salinas totalmente

Sí, pero también ahorita ya soy más relajado, también ya conozco el equipo, ya conozco el proceso, antes creo yo que era más intenso, cuando no conoces, cuando llegas y ves como qué te depara y qué vas a hacer y con quién vas a trabajar, si llegas como muy ansioso, entonces si antes era como, me ponía como muy acelerado, y ahorita creo que estoy como que muy relax, tampoco ya no llega el nervio.

Ya no llega el nervio, pero creo que la emoción en cada proyecto siempre llega, claro, pero diferente, ¿qué te transmite ya estar detrás de ese lente, que empieza a sentir, te empieza ese cosquilleo todavía?

A mí me emociona todavía, porque cada vez, no desmerito, ningún proyecto que haya hecho antes, pero creo que cada proyecto que voy haciendo va subiendo y ya cuando estás ahí y lo estás haciendo y ya lo ves como muy familiar, dices bueno y ahora qué sigue, entonces en el inicio está muy padre.

Ahorita que me tocó cuando fuimos a Tulum a hacer lo de Chanel, que fue una chamba que salió de otra editorial que íbamos hacer allá para Bazaar, nos hablan de Chanel, terminamos haciendo para ellos con otra modelo en la playa y yo así de, estaba yo tomando las fotos, y así de en qué momento iba yo estar aquí con esta modelo que tenía años queriendo shootearla, con el equipo con el que estoy, nos la estamos pasando chido, muy padre, es toda una experiencia, la verdad.

¿Qué criterios utilizas para elegir esas fotografías, o sea al final del shoot cuántas fotografías salen en total? Más de mil, pero te dicen que tienes que elegir 2 o 5, ¿cuál es tu criterio?

Es lío, porque a veces, aquí sí se ve bien ella, aquí sí se ve bien la locación, aquí se ve perfecta la luz, entonces siempre es de hacer selecciones y empezar a filtrar, a filtrar, y también cuál es la que funciona más para la revista, en cuestión de composición, en cuestión de cómo se ve la modelo, cómo se ve la ropa, porque también estamos vendiendo ropa pues tiene que verse bien, pero sí tratamos de cada look sacar una foto que se la más icónica. Te metes tú, sigues haciendo tú todo el proceso, o te metes en ciertas partes, o ya tienes un equipo o siempre te metes tú.

Ya ahorita tengo un equipo, pero yo soy el que manda una preselección de esto es lo mejor, una preselección amplia, y de ahí ya empezamos todos, director de arte, editores, empezamos de esta funciona mejor por esto, y ya cada quien va dando como su input en el material.

¿Cuál es esa parte de tu trabajo que dices, seguramente cada proyecto te motiva todos los días, pero cuál es esa parte de tu trabajo, que dices hoy me levanto con el mejor ánimo, porque voy a hacer eso, qué es lo que más…

De los procesos que más me gusta es la pre, o sea la preproducción me emociona, porque voy viendo cómo va tomando forma el proyecto, o sea como la creación de un concepto, el conseguir las cosas para un proyecto, conseguir al equipo, está muy padre, pero el día del shoot es el día que más rush tiene, el levantarme, el órale asistentes con equipo cargando, el llegar a la locación ver y conocer al talento, siempre es súper padre.

Siempre trato de tener cierta interacción, siento que es primordial, es básico, el llegar ahí con el talento y estar ahí cotorreando, porque al final vas a estar todo el día con el talento, entonces, pues está padre, es la parte que más me gusta,

¿Cuánto tiempo te lleva hacer ese shoot?

Depende, cuando es con actrices, depende mucho, cuando es con modelos, es un poquito más fácil, es un poquito más relajado, cuando tengo modelos y una editorial de 6 moods, puede ser unas 5 o 6 horas tranqui, cuando es un poquito de más ropa y es más cambiar, peinar, puede ser un poquito más largo.

El que hicimos con Fernanda Castillo, yo dije, es que Fer es actriz, yo no conocía a Fer, conocía a su esposo, y chulada, entonces cuando llega Fer y dijo, yo tengo todo el día para ustedes, no importa, lo que nunca pasa, que las actrices siempre traen, siempre andan volando, y dije yo unas 6 horas, yo creo que nos tardamos unas 9 horas en el shoot de Fernanda.

Fue un shoot muy largo, porque cambiamos cabellos varias veces, cambiamos muchas veces de outfit, pero salió, salió, y todo el mundo súper relajado, todo el mundo ya sabía que teníamos que estar ahí todo el tiempo, pues hay comidita, nuestros momentos de relajo, nuestros momentos de descanso, y órale continuamos.

Si porque al final, tienes que hacer break, si relaja la cara, relájate, bájale a la intensidad, tómate algo para poder sacar. Si siempre, pero también nos han tocado shoots bien matados, más que nada los de comercial, y otras cosas que nos han pasado en cosas de editorial, en ocasiones que si decimos uff, antes por ejemplo que no planeaba tanto un shoot, pues la experiencia, en algún momento nos tocó hacer un shoot con una revista y yo quería una locación y encontramos unas montañas por Puebla, creo que yo estaba en Waze de que en Google, y dije vámonos, llevaba modelo, maquillistas, era un shoot muy exprés, era un equipo muy chico, 5 personas, vámonos y no dábamos con la locación y veíamos que la gente se tomaba fotos en Instagram y nosotros, pero cómo llegan, cómo llegaron ahí.

Teníamos perdidos dos horas, hasta que vimos a un señor de una comunidad y le dijimos le pagamos, llévenos aquí, conoce, sí, nos llevó, nos metió a montañas, y era de terracería, aquí tienen que dejar la camioneta y tienen que escalar, y escalar cómo… escalar con  porta trajes con ropa, cámaras, estaba la modelo que era amiga de nosotros, y yo hija te toca cargar algo, órale, todos juntos y nos fuimos, una de las fotos más bonitas, me encanta ese shoot, pero muy difícil, muy peligroso aparte, porque estábamos en un barranco, así de que un pasito en falso, y bye, para abajo, pero pues es parte d

Que agradable plática… te comprometemos a que puedas estar en algún evento de ALTHER de manera física, defines perfectamente el concepto de lo que es ALTHER, y queremos lograr en estas ediciones, en esta web, a través de lo digital también, en reconocer esos lideres sin límite, que han traspasado su ciudad, que han traspasado su estado, y creo que lo defines perfectamente, que orgullo Tamaulipeco, que orgullo que seas de Tampico, que orgullo lo vuelvo a repetir por ese cariño que siento con tu familia, y te auguro el mejor de los éxitos, porque al final este crecimiento que has tenido, tú dices 8 años, pero creo que el momento en el que estás ahorita, esos 8 años no son nada, creo que todo ese tiempo has acortado esa brecha profesional, exitosa, por tu talento, por tu talento nato, felicidades Alex, gracias por este espacio, por esta plática, y por brindarle a todos los jóvenes que tengan esa intención, esas ganas de luchar por esos sueños, aunque sean los más disruptivos, aunque sea que vaya en contra de las reglas familiares, de las reglas de la sociedad, que nos van metiendo, que nos van inculcando, que nos van metiendo a la cabeza desde muy chiquitos, a veces el romper, el decir, yo pongo estos límites de esto para poder crecer profesionalmente en lo que me gusta, felicidades.

*Un orgullo tampiqueño en un medio tampiqueño, que empezamos aquí y queremos trascender, así como tú lo has hecho.*

Te puede interesar...