La Secretaría de Economía aseguró que ni la postergación de la instalación de una planta de autos eléctricos por parte de Tesla ni la retórica proteccionista del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, son motivos para frenar la Inversión Extranjera Directa (IED) en México.
“Tenemos avisos y anuncios históricos, y también los registros han sido históricos. En el primer trimestre de 2024 tuvimos 20,000 millones de dólares, que es más del 50% de lo que tuvimos el año pasado. La inversión va muy bien”, indicó la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro.
Después de su participación en la inauguración de la 5ta Edición de Mujer Exporta MX, señaló que “para nada” la postergación de la planta de Tesla en México frenará otras inversiones, pues el mercado de autos eléctricos de esta compañía es de alta gama, muy particular y muy pequeño.
Mientras que las empresas automotrices más “populares” o con mayor fabricación, como Stellantis o General Motors, siguen produciendo “muchísimo” y avanzando, mencionó Buenrostro.
Además, recordó que, oficialmente, Tesla no registró su inversión en México, solo hizo anuncios en medios. “No ha hecho ningún trámite oficial, institucional, conforme a la Ley de Inversión Extranjera”.
En este sentido, el subsecretario de Comercio Exterior, Alejandro Encinas, advirtió que el anuncio de Tesla sobre la planta en México debe tomarse con cautela, pues se “mediatizó demasiado” y hay que entender los ciclos de la inversión, además de que hay un fenómeno mundial de competitividad con la industria de autos eléctricos chinos.
“Esta inversión (de Tesla) desde el inicio se planteó como escalonada, primero en Austin, Texas, y posteriormente en México, pero todavía no se descarta y habría que esperar. Los ciclos de inversiones pueden tomar dos o tres años y también responden a las realidades de los mercados globales y de las orientaciones del consumidor”, dijo.
Respecto a la retórica proteccionista de Donald Trump y las amenazas de aplicar aranceles, Buenrostro aseveró que no ve mucho problema porque el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) fue negociado cuando Trump era presidente.
“Hace una semana, Trump se dijo muy satisfecho con los resultados del tratado, que veía que había dado buenos resultados y que para su gusto, ni siquiera ameritaba una revisión. Lo que nosotros vemos es que no tiene ningún interés de modificar la relación comercial con México”, explicó.
El subsecretario Encinas agregó que las economías norteamericanas están tan entrelazadas que es imposible dar marcha atrás, pues las cadenas de producción son trinacionales y cualquier medida proteccionista entre los tres países de América del Norte podría ser contraproducente.
“Incluso para la propia competitividad de la industria estadounidense. Es irreversible, también hay que recordar que el propio presidente Trump ratificó el tratado comercial (entre México, Estados Unidos y Canadá) en los términos tal como ahora lo conocemos, y ahí habría que separar la retórica electoral de las realidades económicas”, apuntó.