El fenómeno del “súper peso”, que marcó una apreciación récord de la moneda mexicana, ha llegado a su fin en medio de la volatilidad externa y la incertidumbre generada por reformas del Gobierno de México, como la judicial. Desde la jornada previa a las elecciones del 2 de junio, el peso ha sufrido una depreciación del 16% frente al dólar.
El tipo de cambio cerró el martes en 19.71 pesos por dólar, su nivel más alto desde diciembre de 2022. Esto representa un notable aumento respecto a la cotización de 16.96 pesos por dólar reportada por el Banco de México (Banxico) el 31 de mayo, antes de las elecciones en las que Claudia Sheinbaum, candidata presidencial de Morena, resultó ganadora.
Este miércoles, en casas de cambio y ventanillas bancarias de Ciudad Juárez, el dólar ya se vende por encima de los 20 pesos. La depreciación ha puesto fin al fenómeno del “súper peso” de 2023, cuando la moneda mexicana cerró el año con una apreciación récord del 13% frente al dólar.
La depreciación actual se debe a factores externos como la volatilidad en los mercados internacionales, según Alejandro Sandoval Murillo, presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas en Ciudad Juárez. “Pueden ser múltiples factores, como guerras, la guerra comercial en Estados Unidos, o reacciones gubernamentales a esos conflictos”, explicó.
Sin embargo, Sandoval Murillo también señaló los factores internos, incluyendo las reformas propuestas por el oficialismo que buscan implementar elecciones populares en el Poder Judicial. “Los temas internos de las políticas públicas, que están empezando a discutirse en el Congreso y que probablemente se aprueben con el nuevo Congreso, podrían tener consecuencias a mediano y largo plazo”, agregó.
Impacto en la frontera
Los comerciantes en la frontera con Estados Unidos están sintiendo los efectos de la volatilidad del tipo de cambio, tanto positivos como negativos, según Elizabeth Villalobos, presidenta de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en Ciudad Juárez. “Cuando el dólar sube, los productos que consumimos en la frontera se encarecen debido al aumento en los costos de reposición. Sin embargo, también puede haber beneficios como un incremento en el turismo y el consumo de servicios”, comentó Villalobos.
Los residentes de Ciudad Juárez que cruzan a El Paso, Texas, para hacer compras han reportado un impacto negativo en sus bolsillos. “Para quienes venimos a comprar a El Paso, la depreciación del peso sí nos afecta bastante. Los que trabajan en Estados Unidos y gastan en México se benefician, pero nosotros estamos viendo un efecto negativo”, dijo Sandra Rascón, quien hacía fila en el Puente Internacional Paso del Norte.