Las copropietarias de los Sacramento Kings, Lisa Bhathal Merage y Alex Bhathal, están ampliando su participación en el deporte femenino con la adquisición de un nuevo equipo de la WNBA en Portland, que comenzará a operar en 2026. Esta será la tercera expansión de la liga en los próximos dos años, impulsada por el creciente interés en el baloncesto femenino.
Datos clave: Las hermanas Bhathal dirigirán este nuevo equipo, que aún no tiene nombre, tras pagar 125 millones de dólares a través de su compañía Raj Sports. La familia Bhathal adquirió una participación en los Sacramento Kings en 2013.
Portland se une a Golden State y Toronto como los equipos de expansión más recientes, con las Golden State Valkyries uniéndose a la liga el próximo año y Toronto haciéndolo en 2026. Esta decisión se produce menos de un año después de que la WNBA pausara sus planes de expansión a la ciudad debido a renovaciones en el Moda Center, donde jugará el nuevo equipo. Es posible que el equipo femenino tenga que jugar parte de su segunda temporada en el Veterans Memorial Coliseum, mientras se completan las obras.
Los Bhathal, que también tienen una participación mayoritaria en el equipo femenino de fútbol Portland Thorns, han manifestado su intención de construir una instalación de práctica dedicada para el nuevo equipo.
Dato sorprendente: Esta será la primera vez que la WNBA regrese a una ciudad de la que se retiró previamente; el Portland Fire estuvo en la liga desde el 2000 hasta su cierre en 2002.
Antecedentes clave: La WNBA ha visto un aumento significativo en popularidad en los últimos años, especialmente el año pasado con la llegada de figuras destacadas como Angel Reese y Caitlin Clark. Esto se refleja en un notable incremento en la audiencia televisiva, ventas de entradas y un acuerdo de medios de 2.2 mil millones de dólares asegurado en julio. La temporada 2024 tuvo el mes de apertura más concurrido en 26 años, con aproximadamente 400,000 asistentes en el primer mes y más de la mitad de los juegos agotados, lo que representa un aumento del 156% en comparación con el año anterior. Además, los juegos promediaron 1.32 millones de espectadores en ABC, ESPN y otras cadenas, triplicando la audiencia de la temporada pasada. El debut de Caitlin Clark atrajo 2.13 millones de espectadores, convirtiéndose en el juego más visto de la WNBA desde 2001.