Decenas de personas fueron captadas haciendo fila para conseguir la nueva palomera de Stitch en Cinépolis, generando revuelo tanto en los complejos como en redes sociales. El lanzamiento, inspirado en el icónico personaje de Disney, provocó largas filas en varias sucursales del país, donde los asistentes esperaban pacientemente su turno para adquirir la edición especial.
Un video viral mostró el nivel de demanda, sorprendiendo a muchos internautas y desatando un debate sobre la disponibilidad del artículo. Mientras algunos usuarios expresaron su frustración por no haber alcanzado una, otros presumieron orgullosamente la suya, alimentando aún más la fiebre por este tipo de coleccionables.
Según un estudio de Boston Consulting Group (BCG), el 70 % de los consumidores busca artículos promocionales de sus marcas favoritas, y el 41 % muestra interés por productos con licencias oficiales, como es el caso de esta palomera.
Aunque aún no se ha confirmado si ya está agotada, el fenómeno ha sido interpretado como un ejemplo del poder que tienen los productos coleccionables en la cultura del consumo actual, y cómo estos pueden generar una respuesta masiva entre los seguidores de ciertas franquicias.